lunes, 1 de septiembre de 2014

Preparadores de Oposiciones para la enseñanza

Para la Real Academia Española un educador es aquél que educa, mientras que un maestro es la persona que enseña una ciencia, arte y oficio, o tiene título para hacerlo. Muchas son las características que debe cumplir el que se dedique a estas profesiones para considerarse excelente, con Preparadores de Oposiciones para la enseñanza estarás listo para presentar la prueba de oposiciones y podrás aprender cómo ser un buen maestro.
Para los estudiantes un buen maestro seguramente será el que haga sus clases más entretenidas, con menos material teórico que aprender y por su puesto el que mande menos tareas. Pero la verdad no es esa, un buen educador debe contar con distintas característica, como liderazgo, honestidad, preparación académica, entre otras.

Trabajo duro
Muchos maestros tienden a ser mediocres en su desempeño hacen lo mínimo que necesitan hacer para cobrar su sueldo; pero otros ponen todo su empeño en crear un ambiente que rete al alumno, que los permita aumentar sus conocimientos. Ser un buen profesor tiene que ver con los conocimientos que tengas pero también con tu actitud frente al salón, al tema y al trabajo. 
Un buen maestro debe mantener el profesionalismo en todas las áreas, desde cómo se ve (su apariencia) hasta las habilidades para organizarse y prepararse todos los días para el desempeño de su labor. Ser un profesional al hablar con representantes, estudiantes y jefes es importante.
El educador debe supervisar la vestimenta y la puntualidad de los alumnos, pero si este no cumple con estas características cómo espera que sus alumnos lo hagan, el ejemplo es básico en lo que se refiere a la educación y el salón de clases.
Desde Preparadores de Oposiciones para la enseñanza sabemos que un maestro sin liderazgo no podrá triunfar dentro de aula, por eso te damos todas las herramientas necesarias sobre ese tema. Un maestro líder compartirá su liderazgo con los alumnos y les enseñará a ser líderes también.
El maestro busca distintos métodos para enseñar a sus alumnos, no se conforma con una lección básica, sino que busca mostrar ejemplos, vídeos, dibujos, hacer ejercicios grupales, obras de teatro e incluso experimentos, lo que la materia que está dictando permita para no hacer tedioso el tema a aprender.

Personalidad necesaria
Un buen educador es una persona cálida, de fácil acceso, preocupado y entusiasta. Es una persona con la que es fácil hablar, no solo para los estudiantes sino para los padres, representantes, demás maestros y personal educativo. Los alumnos deben tenerle confianza para ir a contarle sus problemas pero también sus anécdotas o chistes, así estos tienen la certeza de que tienen alguien de confianza que día a día estará allí para ellos, no solo para enseñarles sino para escucharlos y hasta aconsejarlos.
La interacción del maestro con el grupo es clave en el proceso de aprendizaje, debe estar dispuesto a hablar pero también a escuchar a todo el grupo. 
El respeto es base para la relación alumno-maestro, las opiniones y valores de cada uno deben ser valoradas, un salón debe ser un lugar seguro para expresar ideas y sentimientos. 
También es importante que al maestro le guste aprender, que todos los días pueda mostrar algo nuevo o diferente a sus alumnos, una nueva técnica para enseñar, un juego que permita dar una lección, todo esto mantiene el interés de estos en asistir a clases. El conocimiento servirá de inspiración para los alumnos.
Un maestro debe tener mucha confianza pero sin ser arrogante, alguien desconfiado no puede pararse frente a sus alumnos a dar una clases, debe confiar en sí mismo y en sus conocimientos. Por eso en Preparadores Oposiciones Enseñanza te damos todas las herramientas que necesitas para ser un mejor maestro.

Metas a futuro
Fijarse metas es una característica muy buena para todas las profesiones, para los maestros esto es muy importante. Decirles a los alumnos "hoy veremos dos temas" y cumplirlo es necesario. O por ejemplo proponer que todos obtendrán una nota superior a la de la evaluación anterior, esto sirve de motivación para los niños y jóvenes, que puedan cumplir con lo propuesto.
Proponer la realización de trabajos con plazos específicos, por ejemplo: dos semanas o un mes, permite a los alumnos tener fechas de culminación y establecerse metas para realizarlos de la mejor manera y obtener la mejor calificación. 
En Preparadores de Oposiciones para la enseñanza queremos saber si ¿posees las características de un buen educador? ¿Crees que bajo el ambiente adecuado los niños y jóvenes aprenderán más?